Reino Unido busca un "papel único" en las conversaciones de paz en Ucrania ante el cambio de rumbo de EE. UU.

Tras las indicaciones de un cambio en las prioridades de la política exterior de EE. UU., el Reino Unido se está posicionando para desempeñar un papel clave en las negociaciones destinadas a poner fin a la guerra en Ucrania. El Primer Ministro Keir Starmer declaró que el Reino Unido podría actuar como un "puente" entre la UE y los EE. UU. y está "listo para desempeñar un papel de liderazgo" en la organización de garantías de seguridad para Ucrania. Starmer anunció la voluntad del Reino Unido de enviar tropas a Ucrania si es necesario e instó a las naciones europeas a aumentar el gasto en defensa. Tiene previsto visitar al Presidente Trump en Washington la semana que viene. Si bien el ejército del Reino Unido se enfrenta a desafíos, sigue siendo uno de los más fuertes de Europa, y posee un arsenal nuclear disponible para la OTAN. El Reino Unido asignó el 2,33% de su PIB a la defensa el año pasado y se ha comprometido a destinar 3.000 millones de libras esterlinas anuales a Ucrania hasta 2030. A diferencia de la UE, que se enfrenta a tensiones comerciales con EE. UU., el Reino Unido busca un enfoque más conciliador, con la esperanza de obtener exenciones de los aranceles de importación estadounidenses sobre el acero especializado, vital para la industria de defensa estadounidense. El comercio entre EE. UU. y el Reino Unido es relativamente equilibrado, un factor que el Reino Unido pretende aprovechar. Trump ha expresado su optimismo sobre su próxima reunión con Starmer.