El presidente chino, Xi Jinping, se reunió el miércoles con el rey de Malasia, el sultán Ibrahim. Esta visita se considera un esfuerzo por presentar a Pekín como un socio regional confiable. También tiene como objetivo abordar las crecientes preocupaciones sobre las políticas comerciales de Estados Unidos.
La reunión incluyó debates sobre la profundización de la cooperación en diversos sectores. Estos sectores incluyen la inteligencia artificial, las tecnologías emergentes, los medios de comunicación, el cine y el turismo. Se firmaron varios acuerdos para formalizar esta colaboración.
Los analistas consideran la visita como una medida estratégica de China. Su objetivo es fortalecer los lazos regionales y reforzar su imagen como una potencia colaborativa. Esto ocurre en un momento en que las acciones comerciales de Estados Unidos están desestabilizando los mercados globales.