NASA está lista para realizar un paseo espacial el 30 de enero de 2025, con el objetivo de recolectar muestras de bacterias y hongos cerca de los respiraderos de la Estación Espacial Internacional. Los astronautas Butch Wilmore y Suni Williams llevarán a cabo esta misión de 6.5 horas para analizar cómo sobreviven los microorganismos en el espacio.
La agencia espacial estadounidense está especialmente interesada en los extremófilos, organismos que prosperan en entornos hostiles. A pesar de los rigurosos procesos de limpieza, algunos microbios inevitablemente acompañan a las naves espaciales, lo que plantea preguntas sobre la contaminación en entornos extraterrestres. NASA se ha comprometido a cumplir con un tratado internacional para prevenir dicha contaminación.
La investigación actual implica examinar el potencial de los microbios para sobrevivir y reproducirse en el espacio, lo que podría impactar en futuras misiones tripuladas a Marte y más allá. NASA busca identificar qué microorganismos relacionados con los humanos podrían habitar otros planetas, informando el diseño de naves espaciales y trajes espaciales.
Paralelamente, la agencia espacial rusa Roscosmos también ha estado investigando la vida microbiana en el espacio, informando sobre la presencia de bacterias no formadoras de esporas encontradas fuera de su estación. NASA se mantiene cautelosa respecto a la validez de estos hallazgos y planea generar sus propios datos para comparación.