El 31 de enero de 2025, Moldavia y la Unión Europea alcanzaron un acuerdo final sobre un paquete de ayuda integral destinado a abordar la crisis energética del país. El Primer Ministro moldavo, Dorin Recean, destacó la importancia de la solidaridad europea en contraste con las acciones de Rusia, afirmando que Europa está proporcionando asistencia financiera para aliviar la dependencia energética.
El acuerdo incluye un paquete de ayuda financiera no reembolsable, con Moldavia recibiendo una subvención de 64 millones de euros. De esta cantidad, 30 millones de euros se destinarán a la compra de gas y electricidad para ambas orillas del río Dniéster. Específicamente, 20 millones de euros se dirigirán a la compra de gas para apoyar a la región no reconocida de Transnistria, mientras que 10 millones de euros se utilizarán para la compra de electricidad para la orilla derecha de Moldavia.
Los 34 millones de euros restantes se utilizarán para fortalecer el presupuesto de Moldavia. Anteriormente, el 27 de enero, la UE ya había asignado 30 millones de euros a Moldavia para la compra y transporte de gas para satisfacer las necesidades energéticas del país durante el invierno.