El 2 de julio de 2025, la Comisión Europea anunció una estrategia climática con el objetivo de reducir las emisiones netas de gases de efecto invernadero de la Unión Europea en un 90% para 2040, en comparación con los niveles de 1990. Esto forma parte del plan más amplio de la UE para lograr la neutralidad climática para 2050.
Para apoyar esta iniciativa, la Comisión introdujo un esquema de compensación para las industrias exportadoras con sede en la UE, incluidos los productores de aluminio y acero. Estos sectores perderán permisos de carbono gratuitos a medida que la UE implemente su impuesto fronterizo de carbono el próximo año.
La compensación, financiada por el nuevo arancel fronterizo de carbono de la UE, se estima en 70 millones de euros para 2026. La propuesta también incluye permitir a los estados miembros utilizar créditos de carbono internacionales para cumplir hasta el 3% de sus objetivos de reducción de emisiones a partir de 2036.
El objetivo climático para 2040 y las medidas asociadas están sujetos a la aprobación del Parlamento Europeo y los estados miembros de la UE. La UE busca equilibrar los ambiciosos objetivos climáticos con las realidades económicas de sus industrias, liderando los mercados de tecnologías limpias y manteniendo la competitividad global. Este plan representa un paso significativo hacia un futuro más sostenible, con implicaciones importantes para las empresas y los ciudadanos de la región. Se espera que las industrias españolas y latinoamericanas, en particular, se adapten a estos cambios y aprovechen las oportunidades que ofrece la transición ecológica.