El 14 de enero de 2025, Tulip Siddiq, la ministra británica responsable de los servicios financieros y la lucha contra la corrupción, renunció tras un intenso escrutinio sobre sus vínculos financieros con su tía, Sheikh Hasina, la ex primera ministra de Bangladés.
Siddiq, de 42 años, había negado constantemente cualquier acusación de irregularidades. Sin embargo, el primer ministro Keir Starmer expresó su decepción, afirmando que anteriormente había tenido plena confianza en ella. La renuncia de Siddiq marca la segunda salida del gobierno en dos meses, un revés para Starmer, cuyas calificaciones de aprobación han disminuido desde la reciente victoria electoral del Partido Laborista.
En su carta de renuncia, Siddiq reiteró su inocencia, pero reconoció que su permanencia en el Tesoro podría distraer del trabajo del gobierno. Starmer aceptó su decisión con tristeza, agradeciéndole por su trabajo y confirmando que no se había encontrado evidencia de irregularidades financieras en su contra.
Siddiq fue nombrada para supervisar la política de servicios financieros, incluidas las medidas contra el lavado de dinero, tras la victoria electoral del Partido Laborista. Emma Reynolds ha sido designada como su sucesora.
La investigación sobre Sheikh Hasina, quien gobernó Bangladés desde 2009 hasta su destitución, involucra acusaciones de corrupción y lavado de dinero. Hasina y su partido han negado cualquier irregularidad. Siddiq fue nombrada en una investigación más amplia sobre la posible desviación de fondos de proyectos de infraestructura bangladesíes, con alegaciones de irregularidades financieras vinculadas a un importante contrato de energía nuclear.
Además, Siddiq ha enfrentado un escrutinio sobre propiedades en el Reino Unido asociadas con Hasina y sus aliados políticos. Documentos indican que Siddiq residió en una propiedad en Londres proporcionada por un abogado vinculado al gobierno de Hasina y adquirió otra propiedad en 2004 de manera cuestionable.
Sheikh Hasina huyó a India tras su destitución en medio de protestas generalizadas. La renuncia de Siddiq se produce tras la de Louise Haigh, la exministra de transporte británica, quien renunció a finales del año pasado tras reconocer un delito menor.