El Observatorio de rayos X Chandra de la NASA ha revelado nuevos detalles sobre el agujero negro supermasivo, M31*, que reside en la galaxia de Andrómeda. La investigación, publicada en The Astrophysical Journal, destaca una variabilidad significativa en las emisiones de rayos X del agujero negro durante los últimos 15 años. Este descubrimiento mejora nuestra comprensión de la evolución galáctica y la interacción entre los agujeros negros y sus galaxias anfitrionas.
El astrónomo Stephen DiKerby dirigió el estudio, analizando los datos de rayos X de alta resolución de Chandra para rastrear las fluctuaciones de brillo de M31*. El equipo observó múltiples llamaradas, incluido un evento prominente en 2013, lo que sugiere procesos dinámicos cerca del agujero negro. Estos hallazgos son vitales para comprender cómo los agujeros negros supermasivos influyen en sus galaxias anfitrionas a lo largo de vastas escalas de tiempo cósmicas.
El Observatorio de rayos X Chandra, gestionado por el Centro de Vuelos Espaciales Marshall de la NASA, sigue siendo un instrumento crucial para la investigación astrofísica. Sin embargo, su futuro es incierto debido a problemas de financiación y al retraso en el desarrollo del telescopio de próxima generación, AXIS. La operación continua de Chandra es esencial para los estudios en curso de los agujeros negros supermasivos y su papel en la formación y evolución galáctica. Esto subraya la importancia de una inversión sostenida en observatorios espaciales para ampliar nuestro conocimiento del cosmos.