El escudo electrodinámico contra el polvo (EDS) de la NASA ha completado con éxito una prueba en la superficie lunar. Esta tecnología tiene como objetivo proteger los equipos y a los astronautas del polvo lunar abrasivo, conocido como regolito. La prueba se llevó a cabo a bordo del módulo de aterrizaje Blue Ghost de Firefly Aerospace, el primer módulo de aterrizaje lunar financiado con fondos privados en lograr un aterrizaje exitoso.
El EDS demostró su capacidad para eliminar el regolito de las superficies utilizando fuerzas electrodinámicas. La prueba exitosa concluyó el 16 de marzo, tras el aterrizaje de Blue Ghost el 2 de marzo. El regolito plantea un desafío importante para el hardware lunar, los trajes espaciales y la salud humana debido a su naturaleza abrasiva.
Desarrollado en el Centro Espacial Kennedy con fondos del Programa de Desarrollo de Cambios Radicales de la NASA, el EDS utiliza electrodos y campos eléctricos para mitigar el polvo. Antes de esta prueba lunar, la tecnología se probó en cámaras de vacío utilizando muestras de polvo lunar de las misiones Apolo y en la Estación Espacial Internacional durante la misión MISSE-11 en 2019.
Funcionarios de la NASA declararon que la tecnología EDS está allanando el camino para futuras soluciones de mitigación del polvo, apoyando la campaña Artemis de la NASA y más allá. La agencia prevé utilizar el EDS para proteger radiadores térmicos, paneles solares, lentes de cámaras, trajes espaciales, botas y visores de cascos, garantizando la sostenibilidad de las operaciones lunares e interplanetarias a largo plazo.