La nave espacial X-37B del ejército estadounidense concluye una misión secreta tras 434 días en órbita, aterrizando en Vandenberg

La nave espacial X-37B del ejército estadounidense, no tripulada y utilizada para misiones clasificadas, ha regresado a la Tierra después de pasar 434 días en órbita. El "avión espacial" en miniatura, operado por las Fuerzas Espaciales de EE. UU., aterrizó en la Base de la Fuerza Espacial Vandenberg en California, marcando el final de su misión secreta que comenzó en diciembre de 2023 desde el Centro Espacial Kennedy de la NASA. Lanzado por SpaceX, el X-37B transporta experimentos militares al espacio. Esta misión demostró con éxito la capacidad de ajustar las órbitas utilizando la resistencia atmosférica para la propulsión, mejorando sus capacidades. "Este experimento amplía las capacidades del X-37B, lo que nos permite probar nuevas tecnologías", dijo el director del programa, el teniente coronel Blaine Stewart. Las naves espaciales X-37B construidas por Boeing han pasado colectivamente 908 días en el espacio. El vehículo mide aproximadamente 9 metros de largo, con una envergadura de unos 4,5 metros.

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