China está construyendo un proyecto masivo de energía solar en Mongolia Interior, con el objetivo de combatir la desertificación y proporcionar energía limpia a Pekín y las áreas circundantes. El proyecto Ordos New Energy, con una capacidad de 1.100 MW, se construirá en una sola fase, comenzando este año y se espera que esté operativo en 2027.
El proyecto, apodado "la Gran Muralla Solar", se extenderá por 400 kilómetros con un ancho promedio de 25 kilómetros. Se espera que genere 180 mil millones de kilovatios-hora de electricidad anualmente para 2030, lo suficiente para alimentar a Pekín y sus alrededores.
El proyecto también ayudará a prevenir la erosión del suelo y reducir los sedimentos que ingresan al río Amarillo. Se estima que tratará casi 27 millones de hectáreas de desierto.
Se espera que el proyecto Ordos New Energy genere 38 mil millones de kWh de energía verde anualmente, lo que ahorrará el equivalente a casi 12,6 millones de toneladas métricas de carbón estándar y reducirá las emisiones de dióxido de carbono en aproximadamente 31,3 millones de toneladas.