1 de noviembre de 2024, Reino Unido – El Reino Unido avanza hacia su objetivo de un sistema eléctrico libre de combustibles fósiles para 2030, buscando lograrlo cinco años antes que Estados Unidos y una década antes que la UE.
La estrategia incluye:
Expansión de proyectos solares y eólicos.
Instalación de soluciones de almacenamiento de energía, incluyendo 136 baterías gigantes en Yorkshire del Oeste, diseñadas para capturar y almacenar energía renovable.
Fomento de la participación del consumidor a través de descuentos durante períodos de alta producción renovable.
Octopus Energy, el mayor proveedor de electricidad, ha implementado un sistema de notificación que alerta a los clientes sobre tarifas reducidas en condiciones ventosas, permitiendo a los hogares ahorrar más de £400 ($517) anualmente.
A pesar de los planes ambiciosos, persisten desafíos:
El gas natural aún representa un tercio de la mezcla eléctrica.
Los proyectos solares y eólicos actuales se proyecta que cubrirán menos de la mitad de las necesidades eléctricas para 2030 sin una inversión significativa.
Oposición comunitaria al desarrollo de nuevas infraestructuras.
El gobierno británico planea invertir £2 mil millones ($2.5 mil millones) en proyectos renovables y ha levantado restricciones sobre proyectos eólicos en tierra. La transición se considera esencial para la seguridad energética y la independencia económica.
Se están desarrollando soluciones innovadoras, como casas de 'factura cero' que generan electricidad excedente, para atraer a los consumidores. El objetivo es establecer 100,000 de estas casas para 2030.
A medida que el Reino Unido inicia esta transición energética, el enfoque sigue siendo involucrar a las comunidades y asegurar que los beneficios de la energía renovable lleguen a todos los ciudadanos.