Los cibercriminales están aprovechando cada vez más los motores de búsqueda como Google para engañar a los usuarios mediante una táctica conocida como SEO Poisoning. Este método implica manipular los algoritmos de los motores de búsqueda para promover sitios web maliciosos, lo que lleva a los usuarios desprevenidos a descargar software dañino.
A pesar de la disponibilidad de alternativas como DuckDuckGo, Google sigue siendo el motor de búsqueda dominante. Los cibercriminales se aprovechan de esto incrustando enlaces maliciosos dentro de los primeros resultados de búsqueda, que los usuarios a menudo confían implícitamente. En 2023, la Oficina Federal Alemana de Seguridad en la Información informó sobre un aumento significativo en este tipo de ataque.
Las víctimas pueden descargar sin saberlo software falso, que puede variar desde aplicaciones de oficina falsificadas hasta herramientas aparentemente legítimas que luego instalan malware. En algunos casos, el malware utilizado se disfraza como software genuino, lo que representa una amenaza grave tanto para las redes personales como para las corporativas.
Para protegerse contra el SEO Poisoning, los usuarios deben:
Examinar cuidadosamente las URL en busca de errores tipográficos o caracteres inusuales.
Utilizar software antivirus confiable para detectar y neutralizar amenazas.
Tener cuidado con los anuncios que promueven descargas de software.
Mantener los sistemas operativos y navegadores actualizados para cerrar brechas de seguridad.
Ingresar manualmente las direcciones de los sitios web en lugar de hacer clic en enlaces sospechosos.
Si se ve afectado por el SEO Poisoning, los usuarios pueden necesitar restablecer sus sistemas operativos y reportar incidentes a sus proveedores de seguros. Este método de ataque ganó atención internacional cuando una consulta aparentemente inocente sobre gatos de Bengala en Australia llevó a un fraude generalizado.