El implante de interfaz cerebro-ordenador (ICO) N1 de Neuralink ofrece una nueva esperanza para las personas con parálisis. El implante permite a los usuarios controlar dispositivos digitales con sus pensamientos.
A junio de 2025, siete personas han recibido el implante N1. Seis participan en el estudio PRIME, realizado por el Instituto Neurológico Barrow en Phoenix, Arizona.
Los receptores han informado mejoras significativas en su calidad de vida. Noland Arbaugh puede jugar videojuegos. Alex diseña objetos en 3D. Bradford Smith editó y publicó un video en YouTube. RJ controla un joystick de juegos y una mano robótica virtual.
Neuralink ha ampliado los ensayos clínicos a Canadá. El estudio CAN-PRIME prueba la seguridad y eficacia del implante N1. Neuralink aseguró $650 millones en financiamiento de la Serie E, elevando su valoración a $9 mil millones.
El implante N1 ofrece nuevas oportunidades de independencia y comunicación. Neuralink tiene como objetivo restaurar funciones perdidas y mejorar la calidad de vida.