Taylor Swift ha alcanzado un hito notable al convertirse en la música más rica del mundo, superando a Rihanna con un patrimonio de 1.6 mil millones de dólares, según Forbes. Este aumento significativo en su fortuna se produce solo un año después de que se uniera a las filas de los músicos multimillonarios, marcándola como la primera artista en alcanzar este estatus principalmente a través de su carrera musical y actuaciones en vivo.
El éxito financiero de Swift se atribuye a su extenso catálogo musical, que se valora en aproximadamente 600 millones de dólares, además de cerca de 600 millones de dólares ganados en regalías y giras. Además, posee activos inmobiliarios valorados en alrededor de 125 millones de dólares. Esta capacidad financiera la posiciona por delante de otros artistas destacados, incluida Beyoncé, cuyo patrimonio neto asciende a 760 millones de dólares.
Recientemente, Swift fue honrada como Artista del Año y recibió el premio al Video del Año en los MTV Video Music Awards. Mientras se prepara para reanudar su exitosa Eras Tour el 18 de octubre en Miami, su impacto en la industria musical sigue creciendo, consolidando su estatus como una figura líder en la música contemporánea.