En Bagdad, está surgiendo una vibrante escena artística, con mujeres jóvenes liderando el camino en una forma de arte única y cautivadora: la pintura sobre vidrio. Esta artesanía intrincada, conocida por su precisión y belleza, se ha convertido tanto en una salida creativa como en una fuente de ingresos para muchas artistas aspirantes.
La tendencia cobró impulso en los últimos años, con artistas autodidactas mostrando sus obras en espacios públicos como la calle Al-Mutanabbi. Batoul Al-Khazaali, una artista de 27 años, ejemplifica este movimiento en crecimiento. Comenzó como aficionada, pero su pasión por la pintura sobre vidrio floreció hasta convertirse en una profesión. Alentada por su familia, compartió su trabajo en línea, lo que finalmente llevó a exposiciones públicas y una base de clientes leales. Al-Khazaali ahora gana un ingreso estable con su arte, demostrando la independencia financiera que la pintura sobre vidrio puede brindar.
Tabarak Asaad Shakir, una estudiante de biología, también descubrió el potencial de la pintura sobre vidrio en 2023. Ella usa sus habilidades artísticas para personalizar tazas de vidrio y otros artículos para estudiantes universitarios, lo que la ayuda a financiar su educación. Si bien equilibrar sus estudios y su negocio ha sido un desafío, Shakir ha logrado construir una base de clientes y a menudo entrega pedidos directamente al campus.
La demanda de pintura sobre vidrio en Irak ha aumentado desde 2022. Si bien algunos artistas tienen una formación formal en bellas artes, muchos son autodidactas, utilizando las redes sociales y las exposiciones públicas para promover su trabajo. El mercado atiende a una gama diversa de clientes, desde compradores ocasionales que buscan artículos personalizados hasta coleccionistas atraídos por piezas más intrincadas.
La pintura sobre vidrio requiere habilidad técnica y dedicación. Algunas pinturas se pueden completar en minutos, mientras que otras requieren días o semanas de trabajo meticuloso. Los artistas emplean pinturas especializadas diseñadas para vidrio, madera y cerámica para garantizar la durabilidad. Muchos artistas iraquíes encuentran inspiración en pintores internacionales como Milica Dimitrova, conocida por su arte de vidrio con temas estacionales, y Artanit, cuyos diseños inspirados en la naturaleza son populares entre los entusiastas de la cristalería.
Más allá de su atractivo artístico, la pintura sobre vidrio ofrece un camino hacia la independencia financiera para muchas mujeres jóvenes en Bagdad. Algunas usan sus ganancias para financiar su educación, mientras que otras dependen de ella como su principal fuente de ingresos. El pintor Karim Jabr ve esta tendencia como un desarrollo positivo, destacando la dedicación y la ambición artística de estas jóvenes artistas.