Desert Rock, una de las experiencias hoteleras de lujo más esperadas del mundo, ha abierto oficialmente sus puertas en las montañas de Hejaz, Arabia Saudita. Diseñado por Oppenheim Architecture en colaboración con Red Sea Global, este proyecto visionario establece un nuevo estándar para el viaje inmersivo, integrando a la perfección la arquitectura con el antiguo paisaje montañoso.
Inspirado en la civilización nabatea, conocida por su arquitectura tallada en roca, Desert Rock rinde homenaje a este rico patrimonio histórico. Al llegar, los visitantes entran en un valle oculto que revela gradualmente una colección de instalaciones en 30,000 metros cuadrados de terreno. Las opciones de alojamiento del resort van desde villas en la planta baja hasta suites incrustadas en las montañas, diseñadas para maximizar la luz natural y ofrecer vistas sin interrupciones.
Desert Rock ofrece una variedad de alojamientos únicos adaptados a diferentes preferencias. Las Wadi Villas cuentan con piscinas privadas, mientras que las Cliff Hanging Villas ofrecen vistas dramáticas. Las Mountain Cave Suites y Mountain Crevice Villas ofrecen piscinas en acantilados y privacidad, y la Royal Villa sirve como un refugio personalizado escondido en una parte apartada del valle. Cada elemento del diseño del resort ha sido cuidadosamente considerado para minimizar su huella ambiental y realzar la belleza natural del terreno.
La sostenibilidad es un principio fundamental del diseño del resort. Durante la construcción, los materiales excavados fueron reutilizados para la infraestructura del proyecto, ayudando a reducir los residuos y el consumo de recursos. Desert Rock integra sistemas de enfriamiento pasivos y un uso eficiente de la energía, complementado por plantas nativas que contribuyen a un entorno floreciente. Estas consideraciones ecológicas reflejan el compromiso del resort con el turismo sostenible y la responsabilidad ambiental, estableciendo un ejemplo para futuros proyectos de ecoturismo de lujo.
Desert Rock combina armoniosamente lujo y naturaleza, creando un santuario que permite a los huéspedes experimentar la belleza y el poder del paisaje de maneras profundamente personales y significativas.