Con el objetivo de mejorar la investigación climática, el Instituto Real Meteorológico de los Países Bajos (KNMI) distribuirá nuevos pluviómetros manuales a su red de observadores de precipitaciones voluntarios en 2025. Esta iniciativa busca reemplazar equipos envejecidos, garantizando mediciones de lluvia precisas y confiables en todo el país.
El papel de estos voluntarios es crucial; recogen datos diarios de precipitaciones desde sus propios jardines y áreas locales, contribuyendo a una visión general de los patrones de lluvia en los Países Bajos. Esta información es vital para las predicciones meteorológicas y los estudios climáticos.
Los nuevos pluviómetros han sido rigurosamente probados y cumplen con los estándares internacionales establecidos por la Organización Meteorológica Mundial. Están diseñados para ser más fáciles de usar y ergonómicos, mejorando la experiencia general de medición para los voluntarios.
Para asegurar una transición fluida, el KNMI llevará a cabo un estudio comparativo de dos años en ocho ubicaciones, utilizando tanto los pluviómetros antiguos como los nuevos. Esto ayudará a identificar cualquier discrepancia en las lecturas y mejorar la comprensión de la precisión de las mediciones.
Cada mañana, más de 300 voluntarios registran manualmente las cantidades de lluvia y, cuando es necesario, miden la profundidad de la nieve con una regla. También informan sobre cualquier instancia de granizo. Estos datos se envían digitalmente al KNMI, creando una red detallada de precipitaciones que complementa las estaciones meteorológicas automáticas del instituto.
A través de estas observaciones, los científicos obtienen información sobre la dinámica del cambio climático y la frecuencia de las lluvias extremas, lo cual es esencial para prepararse ante posibles inundaciones.