Investigadores han descubierto que un compuesto derivado del hongo *Aspergillus flavus* puede ser utilizado potencialmente en tratamientos contra la leucemia. Este hongo, a menudo asociado con la "maldición de la momia", ahora muestra promesas en la lucha contra la leucemia.
Científicos de la Universidad de Pensilvania y otras instituciones han aislado una nueva clase de moléculas, llamadas asperigimicinas, de *A. flavus*. Estas moléculas han demostrado la capacidad de inducir la muerte celular en las células de leucemia, lo que sugiere un nuevo enfoque para el tratamiento de la enfermedad. La investigación, publicada el 23 de junio de 2025 en la revista *Nature Chemical Biology*, destaca el potencial de estos compuestos para interrumpir la división de las células cancerosas.
Los ensayos clínicos aún no están en curso, pero el descubrimiento abre nuevas vías en la búsqueda de medicamentos basados en hongos. Los investigadores encontraron que las asperigimicinas pueden bloquear la formación de microtúbulos, que son esenciales para la división celular en las células cancerosas. Notablemente, los compuestos tuvieron poco o ningún efecto en otras células cancerosas, lo que sugiere que sus efectos disruptivos son específicos de ciertos tipos de células.