Arqueólogos han descubierto las ruinas de un templo de 2,000 años de antigüedad construido por los nabateos frente a la costa de Pozzuoli, Italia. Este sitio marca el primer templo nabateo conocido descubierto en la región.
El templo rectangular cuenta con dos habitaciones conectadas a los caminos internos del vicus Lartidianus, un área destinada a comerciantes extranjeros. Las investigaciones indican que la presencia de un santuario nabateo en la zona portuaria confirma una comunidad involucrada en actividades comerciales en Puteoli.
Cada habitación está adornada con paredes de estilo romano y losas de mármol inscritas con la frase latina 'Dusari sacrum', que significa 'sagrado para Dushara', la deidad principal de la práctica religiosa nabatea. La estructura submarina se encuentra a aproximadamente 150 pies de la costa de Pozzuoli, que alguna vez fue un puerto significativo para los barcos mercantes romanos.
Cientos de años de actividad volcánica habían cubierto el antiguo templo bajo capas de magma hasta su reciente descubrimiento durante una documentación arqueológica submarina del puerto de Puteoli en 2023. Se estima que el templo fue construido durante los reinados de Augusto (31 a.C. - 14 d.C.) o Trajano (98 - 117 d.C.).
El Reino Nabateo fue una entidad política independiente desde mediados del siglo III a.C. hasta su anexión por el Imperio Romano en 106 d.C. Los arqueólogos identificaron la habitación A y la habitación B bajo las aguas, construidas con materiales locales. La habitación A contenía dos altares de mármol blanco, uno de los cuales albergaba piedras sagradas utilizadas en el culto nabateo dentro de ocho nichos rectangulares.
Un segundo altar, encontrado en el fondo del mar, tenía tres nichos rectangulares. La habitación B también incluía losas de mármol blanco con la misma inscripción latina. Los nabateos practicaban una religión politeísta influenciada por las culturas griega y egipcia, con numerosas deidades representadas por piedras sagradas colocadas dentro de los nichos de los altares.
En su apogeo, alrededor del nacimiento de Cristo, el Imperio Nabateo se extendía por todo el Medio Oriente, abarcando la actual Jordania, Israel, Egipto, Siria y Arabia Saudita. Esta dinámica cambió drásticamente cuando los romanos tomaron pacíficamente el control de Petra, la capital del reino, junto con toda la población nabatea.
Recientemente, se excavó una enorme tumba en Petra, conocida como El Tesoro, revelando un sitio de entierro previamente desconocido que contenía 12 restos esqueléticos. Entre los hallazgos había una copa en forma de cáliz, notablemente similar a la de la película con Harrison Ford y Sean Connery. Los expertos esperan que el análisis de los restos humanos pueda revelar más sobre los nabateos, el antiguo pueblo árabe que construyó Al Khazneh.