Las manzanas se cultivan a nivel mundial, valoradas no solo por su sabor, sino también por sus compuestos beneficiosos. Además de componentes primarios como azúcares, fibras y ácidos orgánicos, las manzanas contienen metabolitos secundarios, incluidos los polifenoles, conocidos por sus propiedades promotoras de la salud, como efectos antiinflamatorios y antimicrobianos. El proyecto 'CLEARGENES' tiene como objetivo explorar la base genética responsable de la formación de estos metabolitos secundarios en las manzanas.
Walter Guerra, jefe del Instituto de Investigación de Frutas y Vinos en el Centro de Investigación de Laimburg y líder del proyecto, declaró: 'Con 'CLEARGENES', buscamos determinar qué variedades de manzanas ofrecen los mayores beneficios para la salud humana. Al mismo tiempo, confiamos en la bioinformática y en estrategias de cría innovadoras para promover el cultivo de manzanas de alta calidad y respetuosas con el medio ambiente, lo cual es especialmente importante para adaptar el espectro de variedades a los desafíos del cambio climático.'
'CLEARGENES' (CLimatE chAnge Resilience GENES en frutas y verduras italianas) está financiado por el PIANO NAZIONALE DI RIPRESA E RESILIENZA (PNRR). Otras instituciones involucradas se centran en vides, tomates y otras especies de vegetales. El segmento de manzanas de 'CLEARGENES' es un esfuerzo colaborativo entre tres socios: el Centro de Investigación de Laimburg, la Universidad de Trento y LandLab.
Los investigadores están examinando manzanas de una colección de referencia llamada 'RefPOP', que incluye 600 variedades diferentes de manzanas que representan la diversidad genética de las manzanas. Establecida en 2016 en seis ubicaciones macroclimáticas en toda Europa, 'RefPOP' tiene como objetivo investigar las interacciones entre la genética y el medio ambiente. Se pone un énfasis particular en cómo las influencias climáticas afectan las características de calidad de las manzanas. Con este fin, parte de la colección de manzanas se riega, mientras que otra parte se cultiva sin riego.
Como parte de 'CLEARGENES', se recogen muestras de varias variedades de manzanas de los campos experimentales para analizar metabolitos secundarios y propiedades nutricionales. Específicamente, el proyecto busca identificar qué segmentos genéticos regulan la formación y el contenido de polifenoles. Además, se analizará el metaboloma de las manzanas, que abarca todas las sustancias vegetales, incluidos los componentes primarios y secundarios. También se estudiarán los efectos de diferentes condiciones de cultivo (regado vs. no regado) sobre el metaboloma. Francesco Panzeri, miembro del grupo 'Pomología' en el Centro de Investigación de Laimburg, comentó: 'Este análisis nos permite comprender mejor los impactos de los factores ambientales en las propiedades saludables de las manzanas y identificar variedades con alto valor para la salud.'
Otro proyecto, 'AppleBIOME', también se centra en la colección 'RefPOP', ampliando las investigaciones de características agronómicas como rendimiento, calidad de la fruta y susceptibilidad a enfermedades a la diversidad microbiológica de las variedades de manzanas. El proyecto examina el microbioma: la totalidad de microorganismos que habitan una planta. Estos microorganismos, que se encuentran en hojas y frutos, juegan un papel crucial en la salud y resistencia de las plantas. Por primera vez, 'AppleBIOME' analiza el microbioma de las hojas de 600 variedades diferentes de manzanas, con el objetivo de comprender la interacción entre la genética de los manzanos y su microbioma, y cómo los microorganismos afectan la adaptabilidad y resistencia de las plantas. Este proyecto crea un recurso valioso para desarrollar estrategias de cría sostenibles y variedades de manzanas sostenibles. 'AppleBIOME' es financiado por el programa 'MASAF - Joint FACCE-JPI SusCrop'.