Astrónomos de todo el mundo están rastreando un nuevo objeto interestelar, provisionalmente llamado A11pl3Z, que se acerca al Sol. Este es el tercer objeto de este tipo jamás detectado, después de 'Oumuamua (2017) y el cometa 2I/Borisov (2019).
A11pl3Z fue detectado inicialmente por un estudiante de astrofísica utilizando el Deep Random Survey en Chile y posteriormente observado por telescopios como el Gran Telescopio Canarias (GTC). Se estima que el objeto tiene un diámetro de unos 20 kilómetros y viaja a aproximadamente 66 km/s.
Se espera que alcance su punto más cercano al Sol en octubre, pasando a una distancia de aproximadamente 1,35 unidades astronómicas. Si bien no representa una amenaza para la Tierra, pasará relativamente cerca de Marte, ofreciendo una oportunidad de observación única. Los científicos están recopilando datos para determinar su composición y trayectoria, con la esperanza de aprender más sobre los materiales de otros sistemas estelares. Este descubrimiento abre nuevas puertas a la investigación espacial y podría arrojar luz sobre los orígenes de nuestro propio sistema solar. En Latinoamérica, varios observatorios colaboran en estos estudios, contribuyendo al avance de la astronomía y al conocimiento del universo.