El NASA Glenn Research Center y la empresa británica Blue Abyss han formalizado una asociación a través de un Space Act Agreement con el objetivo de avanzar en la formación de astronautas comerciales. Anunciada el 23 de enero de 2025, esta colaboración se centrará en abordar los desafíos en la órbita terrestre baja, cis-lunar, lunar y marciana.
Para junio, Blue Abyss planea entregar un estudio que describa los beneficios mutuos y la infraestructura necesaria para ambas organizaciones, que podría incluir investigación en robótica, vuelos parabólicos y simulaciones de gravedad subacuática.
Blue Abyss tiene la intención de establecer su primera instalación en EE. UU. en 13 acres en Brook Park, Ohio, con una inversión estimada de más de 253 millones de dólares. La instalación atenderá al creciente sector espacial comercial, proporcionando formación para astronautas y personal de empresas como Blue Origin y SpaceX.
El centro de formación contará con una centrífuga humana para investigación en alta gravedad, un simulador de vuelo parabólico para experiencias en microgravedad y una piscina para formación de buceadores y astronautas. Joshua Freeh, jefe de Operaciones de Exploración Humana y Espaciales de NASA Glenn, destacó la importancia de comprender la futura demanda de astronautas comerciales a medida que avanza la misión Artemis.
A pesar de la nueva instalación, la formación de astronautas continuará en el NASA Johnson Space Center en Houston. Se espera que la colaboración genere numerosos empleos en Brook Park, lo que refleja un cambio de su cultura laboral tradicional. Los funcionarios locales ven el proyecto como un catalizador para el crecimiento económico, con nuevos desarrollos, como casas adosadas de lujo, que indican un paisaje demográfico en evolución.
Se anticipa que la construcción de la instalación de Blue Abyss comience a finales de este año, y se espera que el estudio de mercado del Space Act se complete para finales de junio.