Un terremoto de magnitud 6.6 ocurrió en el Pacífico Sur, cerca de Samoa, el 25 de julio de 2025. El epicentro se localizó a 440 kilómetros al suroeste de Apia, la capital de Samoa, a una profundidad de 314 kilómetros. A pesar de la magnitud del sismo, no se reportaron daños ni lesiones. Los Servicios Meteorológicos de Samoa y el Centro de Advertencia de Tsunamis del Pacífico confirmaron que no existía amenaza de tsunami.
Samoa se encuentra en el "Anillo de Fuego", una zona de alta actividad sísmica en el Pacífico. En 2009, un terremoto de magnitud 8.1 en la región generó un tsunami que causó al menos 189 muertes en Samoa, Samoa Americana y Tonga. Este evento subraya la importancia de la preparación y la conciencia ante los fenómenos naturales.
La detección temprana y la respuesta rápida son cruciales para minimizar el impacto de los desastres naturales. Los sistemas de alerta temprana han reducido significativamente las muertes en eventos sísmicos en las últimas décadas, destacando la importancia de la preparación y la conciencia ante los fenómenos naturales.