En julio de 2025, Hong Kong y el sur de China fueron afectados por una serie de tormentas severas que causaron inundaciones, interrupciones en el transporte y daños materiales significativos.
El 20 de julio, el Tifón Wipha impactó Hong Kong, provocando lluvias intensas y vientos fuertes que resultaron en la caída de árboles y la cancelación de numerosos vuelos. Las autoridades emitieron la alerta más alta, la señal de tifón No. 10, y posteriormente la redujeron a la señal No. 3. Se reportaron más de 450 árboles caídos y 26 personas recibieron atención médica en hospitales públicos. Más de 250 personas buscaron refugio en albergues públicos, y parques de atracciones como Hong Kong Disneyland cerraron temporalmente. El tifón continuó su trayectoria hacia la provincia de Guangdong en China continental, donde se debilitó a tormenta tropical severa. Las autoridades en Guangdong emitieron advertencias de lluvias intensas y posibles deslizamientos de tierra.
El 29 de julio, Hong Kong experimentó su primera Tormenta de Lluvia Negra del año, con lluvias torrenciales que causaron inundaciones en áreas como Shau Kei Wan y Chai Wan. La Oficina Meteorológica de Hong Kong emitió la señal de Tormenta de Lluvia Negra a las 9:10 a.m., indicando que se registraron más de 100 milímetros de lluvia en una hora. Posteriormente, la alerta se redujo a la señal roja a las 11:05 a.m. y a la señal ámbar a las 11:45 a.m. Las autoridades advirtieron sobre riesgos de deslizamientos de tierra y aconsejaron a los residentes mantenerse alejados de las pendientes.
Estas condiciones climáticas extremas subrayan la importancia de la preparación y la respuesta rápida ante desastres naturales. Las autoridades locales continúan monitoreando la situación y emitiendo advertencias para garantizar la seguridad de la población.