Los descubrimientos arqueológicos de 2025 en la región de Şanlıurfa, Turquía, en los sitios de Göbekli Tepe y Karahan Tepe, están proporcionando una nueva perspectiva sobre la vida en el Neolítico, desafiando teorías previas sobre las primeras civilizaciones humanas.
Göbekli Tepe, un sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, ha mostrado evidencia de haber sido más que un centro ceremonial. El hallazgo de herramientas, piedras de moler y restos de animales sugiere una ocupación humana prolongada, llevando a los arqueólogos a considerar que también pudo haber funcionado como un área residencial. Esta interpretación contrasta con la visión anterior de un lugar de culto exclusivo para cazadores-recolectores del Neolítico. Karahan Tepe, datado entre 9.500 y 10.000 a.C. y considerado uno de los primeros pueblos conocidos, ha revelado estelas en forma de T y tallas de animales, indicando una conexión cultural con Göbekli Tepe. Con solo el 5% de Karahan Tepe excavado hasta 2023, el potencial para futuros descubrimientos es considerable.
El interés global en estos sitios ha aumentado significativamente. Göbekli Tepe atrajo a 326.000 visitantes entre enero y julio de 2024, superando los 290.000 de 2022. La importancia de Göbekli Tepe se ha difundido internacionalmente a través de exposiciones, como la que tuvo lugar en el Coliseo de Roma desde el 24 de octubre de 2024 hasta abril de 2025, la cual presentó réplicas de artefactos y atrajo a millones de visitantes. Los hallazgos de 2025 continúan refinando nuestra comprensión del Neolítico, sugiriendo una imagen más compleja de las sociedades antiguas con evidencia de ocupación continua y cultura compartida entre Göbekli Tepe y Karahan Tepe, lo que invita a una reflexión más profunda sobre la organización social, las creencias y las capacidades tecnológicas de nuestros antepasados.