Investigaciones recientes publicadas en Nature Geoscience revelan que la plataforma de hielo Conger en la Antártida Oriental, previamente considerada estable, experimentó un colapso repentino en 2022. Esta plataforma de hielo, que había existido durante miles de años, se fragmentó en icebergs de manera inesperada después de décadas de debilitamiento no detectado.
Mathieu Morlighem, glaciólogo del Dartmouth College, enfatiza la importancia de esta plataforma de hielo, señalando que la capa de hielo de la Antártida Oriental contiene diez veces más hielo que su contraparte occidental. El colapso plantea preocupaciones sobre un posible aumento del nivel del mar si la capa de hielo de la Antártida Oriental comienza a retirarse.
La plataforma de hielo Conger, que abarca un área 20 veces mayor que la de Manhattan, fue observada para haber disminuido de aproximadamente 200 metros en 1994 a 130 metros en 2021. Este adelgazamiento, combinado con grietas existentes, la hizo vulnerable a una tormenta que azotó la región en marzo de 2022, exacerbando su integridad estructural.
Catherine Walker, glacióloga del Woods Hole Oceanographic Institution, descubrió el colapso mientras revisaba imágenes satelitales. La desintegración de la plataforma, aunque no impacta directamente el nivel del mar debido al tamaño de sus glaciares asociados, señala una tendencia preocupante en una región previamente considerada estable.
Investigaciones indican que las corrientes oceánicas han cambiado desde 2010, introduciendo aguas más cálidas que pueden haber contribuido a la deterioración de la plataforma. El glaciar Denman, ubicado a 130 kilómetros al oeste de la plataforma Conger, también podría enfrentar desestabilización, contribuyendo potencialmente a un aumento significativo del nivel del mar global.
Los hallazgos subrayan la necesidad de un monitoreo continuo de la Antártida Oriental, ya que los cambios en este sector podrían tener implicaciones de gran alcance para el nivel del mar global.