Abandono de animales: un crimen federal en Brasil

Editado por: Natalia Z.

¿Sabías que abandonar animales es un crimen federal en Brasil? Desde 1998, hay una ley que castiga el abandono con penas de prisión y multas. En 2020, una nueva ley aumentó la pena de prisión a hasta cinco años por casos de crueldad animal que involucran perros y gatos. Brasil clasifica el abandono de animales como un acto de crueldad.

Los animales no son desechables, y abandonarlos es un acto de crueldad que causa sufrimiento físico. Los animales abandonados luchan por encontrar comida y refugio en entornos desconocidos, dejándolos expuestos a condiciones climáticas adversas y peligros potenciales. También se producen daños emocionales, ya que los animales forman fuertes vínculos con sus cuidadores. El abandono puede llevar a la ansiedad, la depresión y un miedo intenso.

La Organización Mundial de la Salud estima que hay más de 30 millones de animales abandonados en Brasil hoy en día. Durante los meses de vacaciones, como diciembre, enero y julio, las tasas de abandono aumentan significativamente, con el 94,4% de las ONG y protectores reportando un aumento notable durante estos períodos. Además, el 90% de los encuestados afirmaron que también se puede notar un aumento en los casos de abandono durante crisis económicas.

Según la encuesta nacional realizada por Cobasi, aquí hay algunas estadísticas alarmantes:

  • El 75% de los casos de abandono ocurren en áreas urbanas, siendo los perros mestizos los más afectados.

  • Entre los perros, los de pelaje negro (26,2%) y caramelo (23,5%) lideran las estadísticas de abandono, seguidos por los manchados (14,2%) y marrones (10,9%).

  • Las razas más abandonadas incluyen Pitbull (13,7%), Shih Tzu (7,2%) y Chow Chow (5,8%).

  • Entre los gatos, el 87,5% de los felinos abandonados son mestizos, predominando los de pelaje negro (29,5%) y manchado (22,5%).

Las razones para el abandono son diversas, pero el cambio de residencia es la principal, representando el 9,2% de los casos. Otras razones incluyen la incapacidad de cuidar a un animal enfermo (7,6%), el nacimiento de hijos (7,2%), que el animal haya crecido más de lo esperado (7,1%) y cambios en la rutina del cuidador (6,4%).

Cuando adoptamos un animal, asumimos la responsabilidad de su vida y bienestar. Si la persona ya no puede cuidar del animal, existen alternativas como buscar refugio, organizaciones de rescate o adopción responsable, en lugar de simplemente dejarlo en la calle.

Aun cuando los animales son dejados en parques, pueden correr peligro o convertirse en amenazas para la biodiversidad y las personas. En los parques, los animales abandonados pueden causar impactos a la fauna silvestre, adquirir o transmitir enfermedades.

Para alertar y concienciar a la población, desde 2015 se realiza la campaña "Diciembre Verde", que coincide con el Día Internacional de los Derechos de los Animales. Esta campaña aborda la tenencia responsable de mascotas y el combate al abandono y maltrato.

La encuesta destaca que el 83,3% de los encuestados ha registrado casos de devolución de animales tras la adopción, siendo los perros el 85,4% de estos casos. Los motivos para la devolución a menudo están relacionados con la falta de planificación y la baja comprensión del perfil del animal adoptado. "Adoptar un animal es un acto de amor y responsabilidad. La adopción debe ser una decisión consciente y planificada", destaca Daniela Bochi, gerente de marketing de Cobasi.

El llamado también se extiende a la responsabilidad que la propia población tiene en la fiscalización, denunciando los maltratos a animales.

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