El 1 de julio de 2025, el Senado de los Estados Unidos aprobó un importante paquete fiscal propuesto por el presidente Donald Trump. Este paquete incluye recortes fiscales sustanciales y un aumento de las inversiones en defensa y seguridad fronteriza.
El paquete fiscal propone recortes de impuestos por valor de 4,5 billones de dólares, junto con recortes de 1,2 billones de dólares en programas sociales. Estos recortes incluyen el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) y Medicaid, lo que ha generado preocupación entre los legisladores y los beneficiarios. Esta situación recuerda a debates similares sobre la sostenibilidad de los programas sociales en países como España y Argentina, donde la protección social es un tema crucial.
La legislación también introduce requisitos laborales más estrictos para los beneficiarios del SNAP, ampliando el rango de edad e incluyendo a los padres con hijos. Estos cambios podrían resultar en que hasta 11 millones de personas pierdan el acceso al programa. Esta medida suscita interrogantes sobre el impacto en las familias de bajos ingresos y la necesidad de políticas que equilibren la responsabilidad fiscal con la protección social.