El gobierno brasileño está considerando aumentar el impuesto sobre los ingresos brutos del juego (IBG) de las apuestas deportivas del 12% al 18%.
Esta medida tiene como objetivo compensar la pérdida de ingresos del Impuesto sobre Operaciones Financieras (IOF).
Las asociaciones de la industria se oponen al aumento, argumentando que podría desestabilizar los contratos e impulsar a las empresas a plataformas sin licencia.
Según la Asociación Nacional de Juegos y Loterías (ANJL), el cambio en la tributación pone en peligro el equilibrio de los contratos firmados bajo la tasa del 12%.
El Instituto Brasileño de Juego Responsable (IBJR) considera la medida inaceptable y advierte que podría hacer imposible que muchas empresas operen.
El IBJR estima que el mercado ilegal podría crecer del 50% a al menos el 60% debido al aumento de impuestos.
El sector argumenta que la propuesta, además de no resolver el problema estructural de recaudación del gobierno, puede tener un efecto inverso al fomentar el uso de plataformas sin licencia.
El mercado regulado de apuestas en línea movió alrededor de R$3.1 mil millones mensuales en el primer trimestre de 2025, mientras que el mercado clandestino operó con estimaciones entre R$6.5 mil millones y R$7 mil millones mensuales.
La medida se considera que podría socavar los objetivos del marco regulatorio, que incluyen garantizar la recaudación de ingresos, proteger a los consumidores y promover la integridad del sistema.