Pavel Durov Lanza Cocoon: Una Red Descentralizada de Cómputo Confidencial Basada en la Cadena de Bloques TON

El 30 de noviembre de 2025 marcó un hito significativo con el anuncio oficial de Pavel Durov, el visionario fundador de Telegram, sobre el lanzamiento de Cocoon. Esta iniciativa se presenta como la Red Abierta de Cómputo Confidencial (Confidential Compute Open Network), construida íntegramente sobre la infraestructura de la cadena de bloques The Open Network (TON). La propuesta de valor de Cocoon es clara: desafiar frontalmente el dominio ejercido por gigantes centralizados como Amazon y Microsoft en el procesamiento de datos esenciales para la inteligencia artificial. Su objetivo primordial es erradicar tanto los onerosos costes económicos como las persistentes preocupaciones de privacidad inherentes a los modelos tradicionales de computación en la nube. De hecho, la red comenzó a procesar sus primeras solicitudes de usuarios de manera inmediata, ofreciendo una garantía de confidencialidad del cien por cien.

El pilar tecnológico que sostiene a Cocoon reside en la implementación de Entornos de Ejecución Confiables (TEE), haciendo uso específico de la tecnología Intel TDX. Esta decisión arquitectónica es fundamental, ya que permite la ejecución tanto privada como verificable de los modelos de aprendizaje automático. Lo crucial es que esta estructura asegura que los operadores de los nodos que aportan la capacidad de cómputo no tengan jamás acceso a la información sensible que se está procesando, ni tampoco a las valiosas y propietarias arquitecturas de los modelos desarrollados. A cambio de contribuir con sus unidades de procesamiento gráfico (GPU) al funcionamiento de la red, los propietarios de este hardware son recompensados con tokens Toncoin (TON) por completar las tareas de inferencia de IA, sentando así las bases de un mercado robusto y descentralizado para estos servicios.

Telegram ha sido designado como el cliente principal y el promotor más importante de esta nueva infraestructura, lo cual dota a Cocoon de una demanda inicial y una validación inmediata desde su génesis. Durov ha confirmado que, en las próximas semanas, Telegram incorporará nuevas funcionalidades basadas en inteligencia artificial dentro de su popular aplicación de mensajería, todas ellas sustentadas por esta infraestructura que garantiza la privacidad. La integración con el vasto ecosistema de Telegram, incluyendo las Mini Apps —un segmento que generó ingresos superiores a los mil millones de dólares para los desarrolladores externos durante el año anterior—, se perfila como un motor de demanda excepcionalmente potente para Cocoon.

La concepción inicial de Cocoon fue revelada por Pavel Durov durante el 15º encuentro sectorial Blockchain Life 2025, celebrado en Dubái, Emiratos Árabes Unidos, un evento que congregó a más de 15,000 profesionales. En su presentación, Durov enfatizó su convicción de que la descentralización es un cortafuegos indispensable contra el control absoluto de la inteligencia artificial por parte de las grandes corporaciones tecnológicas. Actualmente, la red se encuentra en una fase activa de expansión, buscando activamente sumar más proveedores de GPU y desarrolladores de aplicaciones que deseen aprovechar este conjunto descentralizado de recursos computacionales a precios competitivos de mercado.

Operacionalmente, Cocoon se estructura como una Red de Infraestructura Física Descentralizada (DePIN). El sistema de pagos utiliza contratos inteligentes alojados en la cadena de bloques TON para abonar las recompensas en Toncoin tras la finalización exitosa de las tareas, estableciendo un mecanismo de liquidación transparente que elimina la necesidad de intermediarios centrales. Esta estrecha simbiosis con TON, que actúa como el eje económico y de coordinación, posiciona a la cadena de bloques como una capa de infraestructura crítica para las cargas de trabajo de IA que requieren confidencialidad dentro del entorno de Telegram, cerrando así un ciclo económico virtuoso entre los servicios ofrecidos, la compensación a los propietarios de GPU y las funcionalidades entregadas al usuario final.