El Banco de Corea (BOK) ha decidido suspender temporalmente su proyecto de moneda digital del banco central (CBDC), conocido como "Hangang", que estaba en fase piloto con 100.000 ciudadanos. Esta decisión se alinea con la reciente iniciativa del gobierno surcoreano para permitir la emisión de stablecoins respaldadas por el won coreano, reflejando un cambio en la estrategia financiera del país.
El BOK había estado colaborando con instituciones financieras locales para evaluar la viabilidad de una CBDC, pero la nueva legislación propuesta por el partido gobernante, que busca legalizar la emisión de stablecoins, ha influido en esta pausa. La legislación exige que las empresas emisoras de stablecoins tengan un capital social mínimo y la aprobación de la Comisión de Servicios Financieros (FSC).
Además, el BOK está considerando la posibilidad de que las instituciones financieras emitan sus propias stablecoins, lo que podría aumentar la competencia y la innovación en el mercado. Estas acciones demuestran la determinación de Corea del Sur de abrazar el futuro digital con responsabilidad y visión.