Se espera que el precio de las acciones de Uber (NYSE:UBER) alcance nuevos máximos, impulsado por una combinación de factores, incluido su sólido negocio, su fuerte flujo de caja y sus inversiones estratégicas en inteligencia artificial (IA).
La ventaja tecnológica de Uber radica en el uso del aprendizaje automático y la IA para optimizar los servicios de transporte compartido. Esta tecnología, que aprovecha los datos en tiempo real e integra sistemas de pago y comunicación, mejora la experiencia del usuario y la eficiencia en todas las plataformas. La empresa también es líder en la revolución de la conducción autónoma, aplicando su experiencia en IA al desarrollo de flotas autónomas.
La fortaleza financiera de Uber es evidente en su floreciente negocio y su sólido flujo de caja. La empresa ha logrado un crecimiento de ingresos de dos dígitos en 2024, impulsado por la expansión a nuevos sectores verticales y la mejora del apalancamiento de las ganancias. Esto ha dado como resultado un flujo de caja significativo de $1.8 mil millones, que representa el 15% de los ingresos, con casi el 95% clasificado como "flujo de caja libre".
Este sólido flujo de caja ha permitido a Uber reducir la deuda, recomprar acciones de forma agresiva y reinvertir en su negocio. Se espera que estas tendencias continúen en 2025, proporcionando un impulso adicional al precio de las acciones.
Los analistas son optimistas sobre las perspectivas de Uber, con una cobertura en aumento, un sentimiento firme en "Comprar moderado" y objetivos de precios estables que indican un potencial de alza del 35% desde los niveles actuales. Los inversores institucionales también son optimistas, con nueve trimestres consecutivos en los que el volumen de compra ha superado el volumen de venta.
La acción de Uber ha experimentado una evolución positiva a principios de 2025, con un volumen en aumento y indicadores que apuntan a un movimiento alcista. Los principales niveles de resistencia incluyen las medias móviles de 30 y 150 días, que podrían romperse pronto.