El 22 de diciembre, el presidente electo Donald Trump anunció la nominación de Scott Kupor, socio gerente de Andreessen Horowitz, como director de la Oficina de Gestión de Personal, responsable del reclutamiento y recursos gubernamentales.
Kupor agradeció la oportunidad, señalando que le permite colaborar con Elon Musk y Vivek Ramaswamy, líderes del recién formado Comité de Eficiencia Gubernamental (DOGE), enfocado en reducir el gasto y las regulaciones gubernamentales.
Trump también ha seleccionado a Sriram Krishnan como asesor principal de políticas sobre inteligencia artificial en la Oficina de Política Científica y Tecnológica de la Casa Blanca. Krishnan tiene experiencia en grandes empresas tecnológicas como Microsoft, Meta, Twitter, Snap y Yahoo, y anteriormente gestionó X temporalmente tras la adquisición de Musk por 44 mil millones de dólares en 2022.
Musk, la persona más rica del mundo, ha surgido como uno de los asesores más cercanos de Trump. Se espera que Krishnan colabore estrechamente con David Sacks, otra figura tecnológica prominente, quien fue nombrado asesor de criptomonedas y IA a principios de este mes.
El mismo día, Trump nombró a Ken Howery, cofundador de PayPal, como embajador de EE. UU. en Dinamarca, y a Michael Kratsios, CEO de Scale AI, como director de la Oficina de Política Científica y Tecnológica. Kratsios había sido director de tecnología durante el primer mandato de Trump.
Además, el exejecutivo de Uber, Emil Michael, fue nombrado subsecretario de investigación y tecnología. Los líderes tecnológicos han elogiado las selecciones de Trump en las redes sociales, con el ex CEO de Meta, David Marcus, llamándolas “notables” y el CEO de Box, Aaron Levie, describiéndolas como “muy fuertes”.
Desde la victoria de Trump, varias empresas tecnológicas han comenzado a apoyarlo, en un fuerte contraste con su primer mandato, cuando la industria mantenía una relación tensa con él. Amazon, Meta y el CEO de OpenAI, Sam Altman, han anunciado donaciones de un millón de dólares cada uno a la comisión inaugural de Trump. En las últimas semanas, los líderes de Silicon Valley han aumentado sus visitas a la residencia de Trump en Mar-a-Lago, Florida.