Subasta de un Range Rover de la Reina Isabel II en el Festival de Silverstone

El Festival de Silverstone, programado para el 23 de agosto de 2025, acogerá la subasta de un Range Rover Supercharged que perteneció a la Reina Isabel II. Este vehículo, utilizado por la Reina entre 2006 y 2008, es un símbolo de la historia británica. El modelo de 2006, con motor de 4.2 litros supercargado y 120,000 millas recorridas, es una pieza de colección que evoca recuerdos de una era de elegancia y tradición. Su acabado en Tonga Green y la tapicería de cuero Sand Oxford reflejan el gusto refinado de la Reina. Las modificaciones, como las aletas de barro y los asideros traseros, fueron realizadas para asegurar su comodidad, demostrando la atención al detalle que caracterizaba a la monarca. La subasta, que se celebrará en el edificio The Wing del circuito de Silverstone, promete ser un evento emocionante. La transmisión en vivo a través de la página web de Iconic Auctioneers y su canal de YouTube permitirá a coleccionistas y entusiastas de todo el mundo participar en esta oportunidad única de poseer un pedazo de la historia real británica. Este evento no solo celebra la vida de la Reina, sino que también nos invita a reflexionar sobre el valor de los objetos que trascienden el tiempo, conectándonos con el pasado y recordándonos la importancia de la herencia cultural. La popularidad de los vehículos de la realeza es innegable. Según un informe, los coches de la familia real británica suelen aumentar su valor en el mercado de coleccionistas, a menudo superando las expectativas de precio iniciales. Este Range Rover, con su pedigrí real, seguramente atraerá a compradores dispuestos a pagar una suma considerable para tener un objeto asociado a la Reina Isabel II. Además, el interés por los objetos relacionados con la realeza británica ha experimentado un aumento constante en los últimos años, impulsado por la curiosidad y el respeto hacia la monarquía. La subasta de este Range Rover es una oportunidad para conectar con un pasado que sigue influyendo en el presente. Es un recordatorio de que cada objeto, cada detalle, puede contener una historia que merece ser contada y preservada. La posibilidad de adquirir este vehículo es una invitación a poseer una parte de esa historia, a ser custodios de un legado que trasciende el tiempo y nos conecta con la esencia misma de la realeza.